ELLA

 

                          El mes de Marzo me gusta especialmente, se pronuncia suave, ligero y siempre viene lleno de flores.

ELLA no nació en Marzo, es Virgo, 18 de Septiembre de....su año de nacimiento es una incognita para todos, y ahora incluso para ella.

Siempre pensé que era coetanea del Garra, pero su coquetería no le permite desvelarlo.

Asi que me veo con 50 años y ELLA según sus cuentas con 60 años.

Lo cierto es que tiene toda la razón del mundo

¿acaso nuestra edad interior se identifica con la exterior?

Pues en mi caso y en el de ELLA no.

ELLA  es la fuerza del universo cuando empieza a contar chistes y no puede parar.

ELLA es la brisa de la Caleta con tacones de aguja.

ELLA es la que con la mano derecha maneja la fiesta, y con la izquierda te saca a empujones a la pista de baile.

Y tu te sientes tan pequeñita a su lado, ELLA brilla de dentro hacía fuera, y al bailar sevillanas mueve los brazos como si la música los meciera , en un vayven prodigioso.

Y tu lo intentas, ante su atenta mirada, pero no naciste en Cadiz, asi que el arte que corre por tus venas es una mezcla extraña entre el  Mar y la MOntaña, y lo sigues intentando toda la vida

Pero el arte no es hereditario

ELLA son tacones lejanos, y su taconeo es tan familiar que lo encontrarías entre un millón de agujas.

ELLA es una pequeña tos todas las mañanas, acompañada de una eterna sonrisa

El caracter tampoco es hereditario

ELLA es conocida en todo el barrio , y te acompaña a la pescadería solo para decierle al pescadero las piernas tan bonitas que tiene su niña, levantando un poquito la falda si fuera menester.

ELLA puede descubrir a ojo la talla de tu sujetador, y si no puede ese día a ojo utilizará sus manos.

Y ELLA NO FALLA, OTRO DON.

ELLA puede aparecer un día con un gatito siames en el bolso mientras tu juegas en la calle al pilla pilla

Y puede disuadir al ladrón de bolsos con un golpe certero de su bolsa de la compra, donde no recordaba que llevaba un bote de nocilla, ¿o quiza si lo recordaba?

Ahora a veces no recuerda, pero solo las palabras, recuerda el amor que va implicito en un abrazo y recuerda sonreir, a veces a carcajadas.