José Las Heras aparte de ser un gran artista era un ser de LUZ, y así pudimos disfrutarlo.
"EL BESO QUE NUNCA TE DÍ "
Los días de playa eran siempre maravillosos, acostumbraba a llegar a la loma del puerco cuando el sol estaba encima del verde Mar, sólo una vez consiguió ver el efecto en el agua por el cual acuñaban a Cádiz con el sobrenombre de "La tacita de plata".
Era una tipa planificadora, le gustaría ser mas hippy , más alocada, pero al ver su nevera para pasar el día en la playa, lo de hippy como que no.
Hummus para comer, un buen salmorejo, agua, toalla pequeña para secarse la cara cuando salía del mar, servilletas de algodón orgánico, dos por si acaso, y de postre sandia.
Cepillo de bambú para peinarse, diadema, gafas de sol , gafas graduadas para leer, cascos para escuchar música, crema solar protección 120, crema solar para la cara antiarrugas, cacao para los labios, pastillas para lavarte los dientes sin necesidad de agua ni de cepillo, y por supuesto lectura variada
TODO EN UNA SOLA MOCHILA (el secreto es una buena organización)
Hoy era el día del bikini amarillo, el que le hacía unas tetas increibles, redondas, turjentes , le encantaba que se le marcase el pezón, todas las miradas iban ahí, la gente se ponía nerviosa ó se hipnotizaba.
Esa playa era un escándalo, solo un pequeño chiringuito, poco concurrida y el agua más transparente.
Se estaba desnudando y difrutando de la brisa cuándo le vio salir del agua. ¿Os acordais de la imagen de Ursula Andress? Pues mejor , moreno, treinta y pocos, fibroso, los suficientes músculos en el lugar preciso, muy delgado, y como colofón unos ojos verdes que quitaban el hipo.
No sabía si era ella, ó su cerebro le estaba jugando una mala pasada pero el buenorro iba a cámara lenta, miró a la derecha y a la izquierda a ver si alguien más lo veía pero la cámara lenta era solo para ella.
- No me jodas que el brownie que he desayunado tenía maría.
Siguió disfrutando de la película a cámara lenta mientras se secaba con la toalla, primero la cara, luego el torso, ese pedazo de torso, las piernas y por último una pasadita por donde la espalda pierde su nombre.
Normalmente los pezones se le marcaban, pero ahora mismo indicaban claramente su excitación. No recuerdo si la boca la tenía abierta ó cerrada.
la camara lenta terminó cuando él se giró , la vio y esbozo una leve sonrisa.
Estaba totalmente segura de que estas cosas solo pasaban en las películas, en esas tontas que terminan en boda, no no , sacudio la cabeza, esta que termine en polvo, en un buen polvo. ¿has oido narrador?.
!Oye no me despistes que no soy Woody Allen y pasamos del erotismo al Indie¡
La tarde transcurría tranquila, el sonido de las olas la acunaban y no podía estar más contenta con las vistas, sin menospreciar al Mar.
Intentó tomar el sol, leer un poco pero su cabeza daba vueltas, y todas alrededor de la misma postura. Y no era el misionero por supuesto.
Llegó el momento de darse un baño, se dirigía al agua cuando al pasar a su altura vio como la miraba , no de soslayo no, y una vez saltó las olas, cosa que le encantaba hacer y solía acompañarlo de unos pequeños grititos, se tumbó boca arriba, haciendo el muerto y se dejó llevar.
El sonido del mar, el balanceo del agua que la mecía, el sol en su rostro .
Antes de salir del agua metió la cabeza y se echó todo el pelo para atrás( todas sabemos la cara que se nos queda si el pelo te juega una mala pasada) tal cual como una sirena, andaba despacio, moviendo a buen ritmo las caderas y él volvió a mirarla , esta vez con una sonrisa plena de las que están llenas de dientes blancos.
Llegó a su toalla casi temblando, pensando le tengo en el bote, hoy es un día flipante...cuando miró fue a coger la toalla y se dio cuenta que la amplia sonrisa no era solo para ella, tambien era para su teta izquierda que estaba fuera del bikini amarillo.
¿Ves, tan pendiente del pelo y las tetas que? Eso es de primero de playa. y por cierto soy narradora.
Que cojones, pensó, a la vez que se quitaba la parte de arriba del bikini amarillo. Nunca hacía mucho topless, por miedo a quemarse las lolas, pero hoy se embadurnó bien de crema solar, tan bien que hasta se puso cachonda con el masaje.
Empezó su ritual, se peinó el pelo, se echo el aceite para protegerlo y se lo recogió en una moño. Estaba sacando la comida de la nevera cuando llegó una sombra.
-Hola, perdona ¿ no tendrás un tenedor de sobra ?
Era el, mas buenorro de cerca que a camara lenta.
-Perdona, que mal educado, soy Albert.
-Hola , yo soy Afrodita, como la de Mazinger Z, por lo de la teta fuera digo.
-jaja Pues deberias tenerlas siempre fuera, las cosas bonitas no deberian estar solo en los museos.
- Pues mira , llevas razón, te presento a mi teta derecha, no la conocias. Hechas las presentaciones toma, es un tenedor de bambú, cuando termines no lo tires, me lo devuelves que no es de un solo uso.
-Muy bien, Gracias ¿Afrodita?
-Si, si es mi verdadero nombre, mis padres que tenían mucha guasa.
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