Ir al contenido principal

CAMBIO DE HORA


Tenía la costumbre de cambiar la hora justo cuándo se iba a dormir; aunque fueran las 10 ó las 11.

Ese Sábado tocaba adelantar el reloj, una hora, tan sólo una hora.


Nunca esperaba al día siguiente,tan metódica como siempre.


Esa vez notó un chispazo al coger el despertador, pero no le dió mayor importancia, tenía que arreglar ese maldito enchufe.
Mejor le hubiera ido.

La noche transcurrió como todas, entre duermevelas , pesadillas y apariciones.

Cuándo era mas joven tenía una libreta en su mesilla de noche y escribía todos sus sueños, a veces por capítulos. Recuperaba el sueño de la noche anterior.

Ese Sábado apareció su padre en un sueño, que como siempre empezaba dulce y terminaba amargo, cuándo despertó solo recordaba "Debes avanzar, cariño".

Comentarios

Entradas populares de este blog

MIS PENSAMIENTOS

  Su memoria hacía tiempo que se había vuelto totalmente selectiva y eso la aturdía un día si y otro también. Sobre todo los días donde sus pensamientos se volvían en su contra y la bombardeaban con críticas feroces y juicios tremendamente hirientes. No conseguía recordar si había hecho algo bien, productivo, si había sentido Amor o compasión, entonces decidió escribir un diario que le recordase a su dolorido corazón todo de lo que era capaz. Algunos días escribía hasta 3 veces, como se sentía, que había comido e incluyó un diario de gratitud. Cuando llegó Diciembre los cuatro primeros cajones del armario estaban repletos de libretas, algunas de tapa dura con llamativos colores, un total de 8  y un diario. Así que cuando su mente la acribillaba con afirmaciones o preguntas tipo: - Eres una perezosa. - ¿Quién crees que eres tú para dar consejos? - ¿ Quién va  a querer escucharte? - Hoy no has hecho ejercicio. - Tu tripa sigue ahí. - ¿ Porque estas triste, que derecho tiene...

BASADO EN HECHOS CASI REALES

  BASADO EN HECHOS CASI REALES Querida Diaria: Imagino que te conté , hará un año, que el Sr. Marido tenía epicondilitis, en el codo derecho. - Si, hace un año exactamente. ¿No me digas mari que se ha quedado manco?. - Todavía no, pero tú dale tiempo al tiempo, o mejor dicho, dale tiempo al Sr. Marido. Tenía que hacerse una resonancia para ver porqué no se le bajaba la inflamación , a pesar del reposo. - ¡ Madre mía¡  Pues entre la inflamación del codo y la de los santos huevos tiene que ser un poema el Sr. Marido - ¿Ya has estado hablando con el a mis espaldas? ¡ No se os puede dejar solos¡ Al tema, que se nos pasa el arroz. Llamé para pedirle cita, como la amantísima mujer que soy, porque el Sr. Marido jura y perjura que no tiene claustrofobia, pero insiste en una resonancia ABIERTA. Finalmente encuentro un hospital donde hacen resonancias por miembros. PETICIÓN  DE CITA - Buenas tardes, quería cita para una resonancia de codo. - Perfecto, tengo unas preguntas que hacer...

HOGAR

  La luz entraba tímidamente a través de los balcones, que miraban con quietud los primeros rayos de sol que iluminaban la calle Jorge Juan. Los techos altos, las molduras post modernas, el suelo de madera de sabina, todo entremezclado convertía su hogar en un sueño recurrente. Todas las habitaciones disponían de luz natural, fue lo primero que la enamoró, cuando hizo la visita con el agente inmobiliario. Cada una de ellas se convirtió en hogar, en el lugar seguro al que poder volver siempre que lo necesitara. "Existe un proverbio Indio que dice que todos somos una casa de cuatro habitaciones. La física, la mental, emocional y espiritual. La mayoría de nosotros solemos vivir en una sola habitación, casi todo el tiempo, pero no debería ser así, y hasta que no visitemos las cuatro habitaciones no seremos una persona completa." -  Rumer Godden -  Huelga decir que hacía tiempo que ella era una persona completa. Durante muchos años tuvo habitaciones cerradas a cal y canto, has...